Segundo paso: determina la veracidad del mensaje
- Revisa el contenido de la noticia para determinar si toda la información apoya la historia comprobando los enlaces. Comprueba que las citas sean reales y se ajusten al significado original.
- Verifica si hay otras fuentes que se hayan hecho eco de los que se declara, denuncia o notifica en el mensaje. Comprueba si el contenido se ha hecho con intención de entretener en vez de informar, y si su mensaje es irónico o sarcástico.
- En el fenómeno conocido como clickbait o ‘señuelo para que hagas click’, se suelen usar titulares que enganchan y no corresponden con su contenido. Antes de compartir, comprueba que esto no sea así. Puedes usar nuestra herramienta de detección de clickbait.
- Comprueba que el contenido no ha sido identificado anteriormente como bulo, y que no haya habido noticias similares ya denunciadas como caso de desinformación por servicios acreditados de verificación de información.
- Haz copias de todo el contenido por si en el proceso de comprobación ‘desaparece’ o los archivos se estropean. En el caso de que ‘desaparezca’ contenido, puedes hacer uso de The Internet Archive.
Tercer paso: observa o controla las emociones y analiza la noticia desde distintos puntos de vista
- Si sientes que tus emociones ‘se disparan’, ponte en alerta. Tus creencias o prejuicios pueden afectar tu capacidad de juzgar justamente la veracidad de la noticia. Muchas campañas de desinformación tratan de provocar tu respuesta emocional para aumentar su difusión.
- Si el contenido busca provocar una reacción emocional en uno u otro sentido, es probable que sea desinformación. La desinformación intenta aumentar la polarización y la desconfianza entre personas o grupos animándolos al enfrentamiento.
- Sospecha de cualquier contenido que intente atentar contra la integridad de sistemas electorales, o que promueva discursos de odio o mensajes que apoyen la misoginia, el racismo, el antisemitismo, la islamofobia, la homofobia o la LGTBIfobia, o que promuevan conspiraciones sobre redes globales de poder.
- Tanto si el contenido está patrocinado como si no, ten en cuenta que pueden utilizar tu actividad previa en una plataforma para identificarte como posible objetivo de una campaña de desinformación, y usar esa información para identificar tus puntos débiles. Por ello, la protección de la privacidad es un elemento crítico para combatir de forma efectiva la desinformación.
* Sara Degli-Esposti es investigadora del CSIC en el Instituto de Filosofía (IFS-CSIC) y ha sido la directora científica del proyecto TRESCA; su trabajo de investigación se centra en la ética de la inteligencia artificial. David Arroyo es científico del CSIC en el Instituto de Tecnologías Físicas y de la Información Leonardo Torres Quevedo (ITEFI-CSIC) y experto en ingeniería criptográfica, privacidad y seguridad de la información; ha sido investigador principal (IP) de TRESCA y actualmente es IP del proyecto XAI-DisInfodemics – eXplainable AI for disinformation and conspiracy detection during infodemics (IA eXplicable para la detección de desinformación y conspiración durante la infodemia).
** El proyecto TRESCA, cuyas siglas responden a Trustworthy, Reliable And Engaging Scientific Communication Approaches (enfoques de comunicación científica dignos de confianza, fiables y atractivos), ha recibido financiación del Programa de Investigación e Innovación Horizonte 2020 de la Unión Europea. Los resultados del proyecto, terminado en abril de este año, están disponibles en la web oficial: https://trescaproject.eu.
Fuente: Ciencia para llevar el blog de CSIC